Hoy pensando en ti
al no verte a mi alcance he devorado
Dos camisas, un mantel, y un rollo de cable
Para apagar la sed he agotado el suavizante
He pensado que esto de extrañarte, es muy extraño
y la frase “comerte a besos”, me gusta muchísimo
Más cuando recuerdo tus lunares,
y el placer de mordisquearlos
Y el reloj se ríe junto al calendario
De los días que faltan para verte aparecer
En el quicio de mi puerta,
Para sacarme de quicio
Y querer tenerte entre mis labios,
(o mis dientes)
Saboreando tu olor, mezclado
Con el ruido de la excavadora
De la calle de enfrente
Mientras en la calle hacen obras,
Yo en ti, obraré el milagro del amor
Tragando tus gemidos,,,
No tardes mi amor… o moriré…
(…de hambre)
2 comentarios:
Humm, leyendo tu poema (o tu vigilia de ayuno) me preguntaba si podrán los vegetarianos, enamorarse como el resto de los mortales. ;)
Un beso y un mordiscón.
A que rara y extraña enfermedad aspiramos todos...
:)
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